La natación salió muy bien. A pesar de estar en una calle donde era el más rápido, tener que marcar el ritmo y estar adelantando a gente durante los 11,4 Km salgo del agua en décima posición con un tiempo de 3:38:59.
Podría haber salido sensiblememnte mejor si mi compañero Llorenç
hubiese entrado a relevos.
El día es soleado, viento soportable. Buenas condiciones para disfrutar de los 540 Km de bici.
Los primeros 180 salen perfectos, todas las vueltas por debajo de 18 minutos, esto permite mantenerme entre los puestos 12 y 14.
Sigo a buen ritmo mientras se rueda con luz diurna.
Mi intención es aprovechar la noche para mantener un ritmo por debajo de los 20´ por vuelta.
Todo se viene abajo cuando cae una tormenta eléctrica impresionante, hacía años que no veía una una cosa así. No es más de media hora de lluvia torrencial, pero deja el circuito lleno de ramas, hojas... Con el circuito en esas condiciones hay que ir con mucho cuidado en evitar las caídas y los pinchazos. No hay caída pero si pinchazo de la rueda trasera, como suele ocurrir en estos casos siempre sucede cuando estás más lejos del recambio, por suerte el tubular me permite llegar a destino despacito pero sin tener que parar en medio de la oscuridad.
Cambio la rueda trasera, pero ya voy mal de cabeza. Intento seguir rodando manteniendo un ritmo aceptable. Cuando la cabeza no acompaña es difícil de conseguirlo, así que cuando me faltan 10 vueltas decido irme a dormir. Duermo apenas 2 horas y media pero me deja nuevo.Vuelvo al circuito de nuevo con sol, acabo las vueltas sin contratiempos y me preparo para la carrera a pie.
El planteamiento para las tres maratones es sencillo. Ritmo muy tranquilo en las dos primeras para poder afrontar la tercera con garantías.
Todo va saliendo bien, van cayendo las vueltas de una manera inexorable.
En la vuelta 29 paro a descansar y a comer algo sólido. Al levantarme de la silla sufro un pinchazo en la parte trasera de la rodilla izquierda.
En un principio no le hago caso ya que el dolor es soportable y puedo seguir trotando.
Con el paso de los Km la cosa se complica, cada vuelta voy más lento y el dolor llega a ser insoportable. Decido ir a la tienda del doctor en busca de una solución. Me venda la rodilla para que no la pueda mover, de esta manera el dolor es soportable. Sigo en carrera, ahora puedo andar más o menos rápido, el dolor se mantiene en unos niveles razonables. Al caer la noche la inflamación ya es evidente, cada paso es un pinchazo. Me quedan 29 vueltas cuando decido irme a dormir esperando que al día siguiente pueda acabarlas dignamente.
El domingo por la mañana la rodilla es un balón de balonmano, intento iniciar el movimiento pero el dolor en increíble y eso sinforzar la pierna. De esta forma no tiene sentido seguir. Decido abandonar la prueba y evitar males mayores.
3 comentarios:
Animos Carlos, a veces es mucho más dificl y duro tomar la decisión adecuada de abandonar, que seguir. Espero te recuperes pronto y puedes seguir dando guerra. Adelante, siempre adelante. Saludos
Gracias Quim, cada hora que pasa estoy más seguro de haber tomado la decisión correcta. Ha pasado casi una semana y aun no puedo ni caminar sin dolor. Espero poder nadar la próxima semana y en tres estar trotando.
Tomaste la decisión correcta, es evidente.
Con todo, estiviste muy bien.
Ahora, descanso y a por otra!
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